Collioure y sus coloridas calles

Collioure es la primera parada en la costa rocosa.

Después de visitar esta colorida e histórica ciudad, puede ir a Port-Vendres, a 15 km de Les Chênes Rouges. Como su nombre indica, el corazón de esta ciudad es un puerto deportivo, pesquero y comercial.

Podrá descubrir barcos excepcionales como el Hermione o el Belem o incluso disfrutar de la venta de pescado recién capturado en el muelle o en la subasta.

Debido a la presencia de este puerto histórico, se realizan numerosas excavaciones y todos los hallazgos se recogen en el depósito de excavaciones.

Arquitectura medieval

Al llegar a esta ciudad, descubrirá un obelisco en la plaza del mercado, un homenaje al monarca Luis XVI. Ciudad militar con numerosos edificios, como el fuerte fanal y el faro de Béar, donde se registran las mayores velocidades de viento del departamento.

La cala de Paulilles La cala de Paulilles, sitio protegido, es una cala en plena naturaleza donde se puede nadar entre los peces. Antigua fábrica de dinamita rehabilitada, podrá descubrir un trozo de historia entre los jardines y talleres del lugar.

Port-vendres-cote-vermeille

Y entonces Port-Vendres se hizo famoso con la película de los Chevaliers du Fiel “Les municipaux”.

Descubrir Banyules-sur-mer

Por el camino, podrá descubrir la ciudad de Banyuls-sur-mer, a 20 km de Les Chênes Rouges.

Con numerosas playas y calas, este municipio cuenta con una zona de reserva natural marina junto con la ciudad de Cerbère.

Banyuls-sur-Mer-cote-vermeille

Descubra la fauna submarina

Para los amantes del buceo, se puede descubrir un lugar en un entorno marítimo protegido donde se conserva la fauna y la flora marinas. La ciudad también es conocida por sus viñedos, que se extienden en terrazas a lo largo de todo el municipio.

Si continúa por la carretera de Cerbère y Port-Bou, entre el mar y la montaña, llegará a España para descubrir otros paisajes y zonas turísticas.